Excelente: gran profesionalidad, tanto en el trabajo administrativo para conseguir permisos y subvención, como en el técnico para instalar los equipos. Siempre pendientes además del funcionamiento correcto de la instalación, y de cualquier incidencia
Aerotermia con fotovoltaica (vivienda unifamiliar)
El punto de partida
Marisa y Manuel se pusieron en contacto con nosotros porque querían reducir el gasto en calefacción de su vivienda.
En esos momentos su casa contaba con una caldera de propano con acumulador de ACS integrado y un sistema de calefacción mediante suelo radiante.
En un primer contacto telefónico nos comentaron que su mayor preocupación era no poder encender la calefacción todo el tiempo que les gustaría para tener una temperatura agradable en toda la casa.
Si lo hacían se dispararían los consumos, ya que tenían una vivienda bastante grande, con un aislamiento medio y situada en una zona climática severa con temperaturas muy bajas en el invierno.
En esta primera conversación nos comentaron que durante los últimos años habían utilizando la calefacción lo mínimo posible y exclusivamente en las zonas donde hacían más vida. A pesar de limitar su uso al mínimo, habían estado pagando entre 600€ y 800€ al mes de gas durante la temporada de invierno.
Dudas y preferencias del cliente
Marisa y Manuel lo tenían claro. Querían poder encender la calefacción para disfrutar de una temperatura agradable en toda la vivienda sin tener que preocuparse de que les llegase una factura elevadísima.
A ellos no les importaba realizar una mayor inversión inicial, pero querían poder disfrutar del confort en su hogar a un precio asumible. Algo que hasta el momento, con un sistema de gas propano, no habían conseguido.
Nuestra propuesta
Desde el principio entendimos cuál era su situación. Comprendimos la frustración que sentían, ya que, a pesar de no poder poner la calefacción cuando les apetecía, estaban pagando entre 600€ y 800€ al mes en la temporada de invierno.
No era la primera vez que nos habíamos encontrado con un caso de este tipo: una vivienda grande, con un aislamiento medio, situada en una zona climática severa y con un sistema de gas propano.
Así que, desde el principio tuvimos claro que lo más adecuado en este caso sería un sistema de bomba de calor geotérmica o aerotérmica del fabricante austriaco iDM, ya que son equipos diseñados para climas muy fríos.
Además, le propusimos que instalasen un sistema de autoconsumo con placas fotovoltaicas para reducir aún más los consumos.
De esta manera, con un solo equipo cubriríamos las demandas de calefacción y ACS. Pero, además, con este sistema también podrían refrigerar su vivienda en verano, utilizando el suelo radiante existente.
Teníamos claro que este sistema le podría proporcionar ese confort que estaban buscando con un consumo muy reducido.
La bomba de calor funciona con tan solo un pequeño consumo eléctrico, que limitaríamos aún más, al contar con un sistema de producción eléctrica con un sistema de autoconsumo fotovoltaico.
Además, les preparamos un completo estudio energético para las dos opciones que les habíamos recomendado: bomba de calor geotérmica y aerotérmica.
Durante nuestros años de experiencia hemos comprobado que este estudio resulta básico a la hora de tomar una decisión acertada. En él detallamos cuál es la inversión inicial para cada uno de los sistemas, así como los consumos y ahorros estimados. Por eso, siempre lo incluimos en nuestras propuestas.
Marisa y Manuel se quedaron gratamente sorprendidos cuando le presentamos este estudio. Según ellos mismos nos comentaron, resultó decisivo a la hora de decantarse por el sistema que les proporcionaría exactamente lo que estaban buscando.
La decisión
Una vez analizadas ambas opciones, Marisa y Manuel se decantaron por el sistema con bomba de calor aerotérmica IDM, ya que -por el precio de la aerotermia– esta requería una menor inversión inicial que la geotermia y contaba, además, con rendimientos muy elevados, incluso con las bajas temperaturas que se llegaban a alcanzar en la zona.
Además, decidieron complementar la instalación con un sistema de autoconsumo fotovoltaico. De esta manera, reducirían al mínimo los consumos de calefacción para su vivienda.
Además, esta inversión en su caso resultaba todavía más rentable, ya que en el ayuntamiento de Hoyo de Manzanares, al igual que en la mayoría de ayuntamientos de España, existían bonificaciones de IBI para las viviendas con sistemas de autoconsumo fotovoltaico.
En su caso esta bonificación sería del 25% durante 5 periodos impositivos. Para poder acogerse a esta bonificación, desde Energanova les facilitamos un informe visado para que lo presentasen en su ayuntamiento.
La instalación
Una vez que nos comunicaron su decisión, estudiamos la instalación existente para poder sacarle un mayor partido. A partir de este estudio, decidimos sectorizar la vivienda en 4 zonas de control independientes, gestionadas directamente desde la propia bomba de calor.
Para hacerlo, colocamos varias sondas de temperatura y humedad vía radio en las diferentes zonas de la vivienda. De esta manera, esta familia disfrutaría de un mayor confort con un consumo más reducido, ya que podrían regular de manera independiente la temperatura y los horarios de las diferentes zonas de la vivienda en base a su uso. Todo ello sin necesidad de hacer una inversión adicional.
Bomba de calor aerotérmica
La instalación cuenta con una bomba de calor aerotérmica aire-agua del fabricante austriaco iDM modelo ML 11-18, cuyo comportamiento responde perfectamente a las necesidades climáticas de la zona, ya que mantiene muy buenos rendimientos incluso a temperaturas muy bajas. Sin duda, la mejor opción para esta vivienda.
Acumulador de ACS
Además, instalamos un acumulador de 300 litros para el agua caliente sanitaria (ACS) marca Enertres modelo DPSA MAX-300 con serpentín de intercambio de grandes dimensiones para lograr la máxima eficiencia de la bomba de calor.
Depósito de inercia para calefacción y frío
Para la inercia de calefacción/frío instalamos un acumulador de 500 litros marca Enertres modelo DPI -500F.
Aunque no sería estrictamente necesario colocar un acumulador de inercia de estas dimensiones, ya que la bomba de calor dispone de un compresor inverter que se adapta a la demanda de la vivienda, decidimos incluirlo para incrementar el aprovechamiento térmico de los excedentes fotovoltaicos.
Hacer esto fue posible , ya que la bomba de calor cuenta con un sistema de regulación Navigator 2.0, que integra una función fotovoltaica.
Esta función permite aprovechar los excedentes fotovoltaicos y acumular la energía en el depósito de inercia tanto en verano como en invierno.
Si este excedente se produce en invierno, la acumula en forma de agua caliente para calefacción; mientras que si se produce en verano, se acumula en forma de agua fría para refrigeración.
Este aprovechamiento térmico de los excedentes fotovoltaicos es una manera muy efectiva de sacar un mayor partido a la instalación de los paneles fotovoltaicos y, por tanto, de convertirla en una inversión más rentable en cualquier momento del año.
Regulación y control
Para el control de la instalación instalamos sensores de humedad y temperatura en 4 zonas de la vivienda.
El sistema de control Navigator Pro integrado en el equipo iDM, permite controlar dichas zonas de manera independiente.
Además, la instalación también se puede regular en remoto y de manera gratuita a través de la app del fabricante austriaco.
Autoconsumo fotovoltaico
La instalación de autoconsumo fotovoltaico consta de un kit fotovoltaico de 3,24 kw de potencia pico (12paneles * 270W) con un inversor híbrido Marca Kostal modelo Plenticore. Este inversor les permitiría, además, integrar en un futuro baterías de litio si quisieran.
El potencial de producción fotovoltaica se estima en torno a 4.000 kWh al año. Aunque, en el caso de esta instalación calculamos que la producción real será inferior, ya que la orientación e inclinación de los paneles no son las ideales.