• El precio del suelo radiante por m2 está en torno a los 40€-45 €/m2.
• Para una vivienda de 100 m2 el presupuesto de suelo radiante estaría entre 4.000 € y 4.500€.
• El suelo radiante consume un 25% menos que los radiadores convencionales.
• Si instalas una bomba de calor de aerotermia o geotermia, el ahorro será del 80% cada mes.
• De modo que amortizarás la inversión en poco tiempo.

Con estos cinco datos, queda claro que instalar suelo radiante es una de las mejores decisiones que puedes tomar si vas a reformar o hacer una vivienda de nueva construcción.

Es un sistema con un precio más elevado que otros, como los radiadores o fan-coils.

Pero también es mucho más rentable a medio y largo plazo.

Por eso, es uno de los sistemas de calefacción con mayor implantación en España durante los últimos años.

Si aún tienes dudas, en este post vas a descubrir mejor qué es el suelo radiante y su precio.

Verás también una comparativa con otros sistemas y te contaremos cómo de rentable es, entre otras muchas cosas.

Pero antes de seguir, si necesitas un presupuesto de suelo radiante solicita un estudio GRATUITO. Así sabrás cuánto cuesta poner suelo radiante en tu vivienda.

¿Qué es el suelo radiante y cómo funciona?

A modo de introducción, en este vídeo entenderás mejor qué es, cómo funciona y cuánto cuesta el suelo radiante en una vivienda.

Vídeo: Precio de un suelo radiante para una vivienda

¿Estás pensando en instalar suelo radiante en tu vivienda?

En este vídeo te explicamos en qué consiste exactamente un sistema de suelo radiante,

cómo funciona, así como qué precio tiene un suelo radiante.

¿Qué es el suelo radiante?

El suelo radiante es un sistema de climatización que sirve para calentar o refrescar un espacio irradiando calor o frío de forma uniforme desde el suelo a toda la estancia.

Para ello utiliza una red de tuberías instaladas ocultas debajo del pavimento, por las que pasa el agua a diferentes temperaturas, según sea la demanda.

A diferencia de los radiadores o fan-colis, el suelo radiante distribuye la temperatura por todo el suelo de la vivienda.

Por eso es tan eficaz.

Porque emplea temperaturas mucho más suaves que un radiador convencional:

• 28-38°C en invierno para calefacción por suelo radiante, y
• 13-18° en verano para refrescar.

Gracias a esto conseguirás un elevado nivel de confort con un mínimo consumo.

Pero, ¿Cómo funciona el suelo radiante?

Verás.

El agua caliente de la bomba de calor o la caldera pasa por un colector como el de esta imagen:

Desde este colector se distribuye el agua hacia el circuito de tuberías del suelo para calentar o enfriar la estancia.

Esas tuberías tienen un diámetro que va desde los 16mm a los 20mm:

Gracias al colector podemos regular la temperatura de cada habitación.

O bien apagar alguna estancia si no necesitamos climatizarla.

Suelo radiante: precio para una vivienda

El precio del suelo radiante por m2 está en torno a los 40€-45 €/m2 si es solo para calefacción.

Y en torno a 45-50€ por m2 si- además de calefacción- también lo quieres para refrigerar en verano.

Por tanto, para una vivienda de 150 m2 el precio de una instalación del suelo radiante estaría en torno a los 6.000 € – 7.000€.

Antes de saber con exactitud cuánto cuesta el metro cuadrado de suelo radiante tienes que tener en cuenta esto:

• El precio de una instalación de suelo radiante es superior a otros sistemas, como radiadores o fan-coils.
• Aporta un confort superior y un consumo energético menor.
• La inversión se amortiza en un plazo de tiempo reducido.

Otros gastos al instalar suelo radiante

Una instalación de suelo radiante no se queda ahí.

Según sea tu caso, puede haber otros gastos derivados.

Verás.

El precio varía en función de las características de la vivienda.

Y, sobre todo, del material utilizado.

Además, si el suelo radiante es eléctrico el coste es menor que si es por agua.

Porque en este último caso es necesario disponer de una unidad exterior (caldera de gas o bomba de calor de aerotermia o geotermia).

Por otro lado, en caso de tratarse de una reforma, a este precio tendrás que añadir el coste de quitar el suelo actual.

Y sumar lo que te costará añadir un nuevo suelo a tu vivienda.

En algunos casos se puede instalar el suelo radiante encima del actual.

Pero debes asegurarte de tener la altura suficiente para poder hacerlo. Si es así, podrás instalar suelo radiante con mortero.

Si no tienes suficiente altura, tienes la opción de suelo radiante sin mortero.

Vamos a ver a continuación en qué consiste cada uno:

Suelo radiante con mortero

Si la altura te lo permite, podrás instalar suelo radiante con mortero.

Consiste en una especie de cemento que cubre y envuelve las tuberías.

Sobre este cemento se sitúa el revestimiento final del suelo, que puede ser madera, cerámica, piedra, etc.

Este mortero debe tener un espesor de unos 5 cm.

Suelo radiante sin mortero

¿Y si no tengo altura suficiente para instalar suelo radiante?

En los casos donde la altura del suelo no permite instalar un suelo radiante convencional, existe una alternativa: suelo radiante seco.

Aunque es una solución versátil, es menos eficiente y más costoso que el suelo radiante convencional.

Y solo es válido para calefacción, ya que el aporte en modo refrigeración es mínimo.

El suelo radiante seco consiste en una capa de paneles aislantes sobre la que se instala la red de tuberías.

Y, sobre ellos, se coloca una lámina metálica que es un elemento conductor.

Sobre esta lámina ya podemos colocar el revestimiento final del suelo (madera, cerámica, piedra, etc.).

Como puedes comprobar, son muchas las variables a tener en cuenta en el precio de una instalación de suelo radiante (como la instalación de suelo radiante con o sin mortero o el nivel energético de la vivienda).

Sobre todo si se trata de una reforma, donde hay que adaptarse a un espacio ya construido.

Por este motivo es importante que un especialista realice un estudio personalizado y detallado de tu vivienda.

Es el único modo de saber con exactitud el precio real.

En Energanova hacemos ese estudio GRATUITO sin ningún tipo de compromiso.

Y después ya tomarás la decisión de si te interesa o prefieres dejarlo para más adelante.

Comparativa de precios entre suelo radiante y radiadores convencionales

Si tienes dudas sobre qué sistema de emisión instalar: suelo radiante o radiadores tradicionales, aquí te dejo una tabla orientativa de precios por metro cuadrado y por radiador:

Sistema de emisión	Precio
Radiadores convencionales	300€ por radiador
Suelo radiante eléctrico	40-45€ por m2
Suelo radiante por agua (recomendado)	45-50€ por m2

Estos precios son muy aproximados y -como has podido comprobar en el apartado anterior- variarán mucho según cada caso.

Otros sistemas de calefacción bajo consumo como alternativa al suelo radiante

El suelo radiante es el sistema más eficaz que existe hoy día para climatizar una vivienda.

Pero no siempre es posible su instalación.

En estos casos, puedes valorar otras dos opciones que también son muy eficientes: radiadores de baja temperatura y ventiloconvectores.

Radiadores de baja temperatura o termoconvectores

Son radiadores con bajo contenido en agua y una gran superficie de intercambio, en los que el aporte de calor se realiza por convección.

Al combinarlos con sistemas de baja temperatura como la bomba de calor, puedes conseguir con tu instalación un gran ahorro energético.

El precio de estos radiadores de baja temperatura varían mucho dependiendo del modelo estático o dinámico, la potencia y la marca.

Para que te hagas una idea estos son los precios orientativos para una potencia de calefacción de diferencia de temperatura de 30ºC:

0,2-0.5 kW

• Estático: 150-250€
• Dinámico: 250-500€

0,5-1.0 kW

• Estático: 200-400€
• Dinámico: 350-700€

1,0-2.0 kW

• Estático: 300-700€
• Dinámico: 500-1.000€

Ventiloconvectores

Los ventiloconvectores son ideales para sistemas con bomba de calor: geotermia y aerotermia.

Son muy eficientes para bajas temperaturas cuando están en modo calefacción.

Y también a altas temperaturas, en modo refrigeración.

Tienen la ventaja de conseguir muy rápido la temperatura deseada. Y, cuando la consiguen, son capaces de mantenerla con un mínimo consumo gracias al efecto natural de convección.

En cuanto al precio, una vez más depende de muchos factores: el tipo de equipo, donde se va a instalar, la potencia, la marca.

Además, el coste de la instalación para ventiloconvectores puede variar entre un 20 y un 40%.

Para que tengas una idea aproximada, por ejemplo, el precio de los ventiloconvectores instalados en la pared varía según la potencia y serían los siguientes:

• 0.5-2 kW: 300-700€
• 2-4 kW: 400-800 €
• 4-6 kW: 600-1.000€

Una vez más te animamos a que solicites un estudio GRATUITO con Energanova para que puedas saber con mayor certeza qué sistema es mejor para ti.

¿Qué calefacción es mejor para el suelo radiante?

Al contrario de lo que sucede con el suelo radiante eléctrico, el suelo radiante por agua- que es del que estamos hablando en este artículo- necesita de una fuente de energía externa para su funcionamiento.

Se pueden utilizar otras fuentes de energía como calderas de gas, gasóleo o pellets, al trabajar con temperaturas de impulsión tan bajas para calefacción.

Pero lo más eficiente es combinar el suelo radiante con una bomba de calor aerotérmica (aire-agua) o geotérmica (agua-agua).

Además, las bombas de calor geotérmicas tienen una ventaja: podrás refrescar la vivienda en verano de manera gratuita.

Esto es posible porque aprovecha la temperatura estable del terreno, sin necesidad de arrancar la bomba de calor y, por lo tanto, sin ningún consumo eléctrico.

En definitiva, la aerotermia o la geotermia son los sistemas más eficientes para utilizar con suelo radiante.

Porque vas a ahorrar cada mes en tus facturas, sin renunciar a una temperatura de confort en tu vivienda.

Descubre aquí el precio de la aerotermia para una vivienda y cómo calcular el precio para tu hogar en menos de 5 minutos.

¿Cuál es el sistema más eficiente para calefacción frío con suelo radiante?

Si instalas una bomba de calor de aerotermia o geotermia, al combinarlo con otros sistemas renovables como placas solares, te va a permitir ahorrar aún más al reducir el consumo energético casi a cero.

Pero un sistema de autoconsumo fotovoltaico no solo te servirá para reducir el gasto de la bomba de calor.

Además también cubrirá otros costes de tu hogar como los de consumo de electrodomésticos e incluso la carga del coche eléctrico.

Por tanto, los sistemas de calefacción sostenibles pasan por la fotovoltaica, suelo radiante y bomba de calor de aerotermia o geotermia.

¿Es rentable instalar suelo radiante?

El suelo radiante es un sistema de climatización rentable incluso a corto plazo.

Estos son los motivos:

• Proporciona un elevado nivel de confort. El suelo radiante permite mantener una temperatura uniforme en toda la vivienda y no existen focos de aire caliente como en el caso de los radiadores o fan-colis. Además, al no generarse corrientes de aire, evitamos que se reseque el ambiente y los movimientos de polvo y ácaros.
• Ahorro energético. Al emplear una temperatura de impulsión menor a la de otros sistema (30-35ºC frente a los 55-70ºC de los radiadores) consigue alcanzar una sensación de confort con un menor coste energético. Es ideal para combinarlo con sistemas de energías renovables como un sistema de aerotermia o geotermia.
• Suelo radiante refrescante. Si combinamos el suelo radiante con una bomba de calor, podremos utilizarlo para refrescar nuestra vivienda durante los meses de calor. Esto se consigue empleando la misma red de tuberías, a través de la que circularía el agua entre 13ºC-18ºC.
• Sistema invisible. Al estar instalado bajo el pavimento, no se ve, simplemente sentimos el confort que nos proporciona. De esta manera, no tenemos ningún elemento que condicione la decoración de la vivienda y dispondremos de más espacio libre.

¿Cuánto consume el suelo radiante?

Una de las grandes ventajas del suelo radiante es su bajo consumo, especialmente al combinarlo con una bomba de calor.

Mira.

Un sistema de suelo radiante funciona con un circuito de agua a baja temperatura (30-35°C en invierno para calefacción y 13-18° en verano para refrescar).

Por ello, el suelo radiante consume en torno a un 25% menos que otros sistemas tradicionales como los radiadores.

Es más.

Ahorrarás un 80% si utilizas el suelo radiante con una bomba de calor, respecto al gasóleo o el gas con radiadores.

¿Cuándo no debes instalar suelo radiante y cuándo es una buena opción?

Como has visto a lo largo de este artículo, no hay duda que el suelo radiante es de los mejores sistema de emisión que existe en la actualidad.

Pero debes tener en cuenta algunos puntos antes de tomar una decisión.

A continuación te ayudaré con ello:

Cuándo NO instalar suelo radiante

• Si la vivienda es obra nueva o la has reformado hace poco, porque tendrías que levantar el suelo.

• Si no haces un uso continuado de la vivienda o necesitas alcanzar una temperatura determinada de forma inmediata. El suelo radiante posee una gran inercia térmica. Esto significa que tarda más tiempo en calentar todo el circuito, pero que una vez que se ha alcanzado la temperatura deseada, se mantiene durante más tiempo, incluso cuando lo hemos apagado.

• Por eso, el suelo radiante es adecuado en viviendas de uso continuado, pero probablemente no es el sistema más adecuado si quieres utilizarlo en momentos puntuales y con encendidos y apagados frecuentes.

Cuándo SÍ instalar suelo radiante

• Si tu casa ya está en construcción o estás planeando construirla.
• En el caso de reformas integrales en las que se vaya a levantar el suelo. En este sentido, si no dispones de la altura suficiente para poner suelo radiante convencional, existe la opción de colocar suelo radiante seco, que requiere menor altura (ya te lo hemos contado más arriba).
• Si tienes poco espacio o quieres aprovechar el que tienes, ya que podrás tener las paredes libres de radiadores.
• En el caso de que haya personas con alergias, ya que se evita la circulación de ácaros.
• Si tienes un sistema de climatización con bomba de calor o estás pensando en instalarlo, ya que con el suelo radiante podrás utilizar tu bomba de calor tanto para calefacción como para frío con un consumo más reducido que con el aire acondicionado.
• Si cuentas con una instalación de placas solares térmicos, ya que te si tienes suelo radiante podrás utilizar los paneles para apoyar al sistema de calefacción.

Tipos de suelo radiante

Existen diferentes tipos de suelo radiante según:

La temperatura de climatización: calor o frío

El suelo radiante para calor funciona con cualquier fuente de energía (caldera de gas natural, gasoil, aerotermia o geotermia) y cualquier sistema (agua o electricidad).

Sin embargo, solo podrás tener suelo refrescante para el sistema que funciona con agua y con aerotermia o geotermia.

El funcionamiento: por agua o electricidad

El suelo radiante por agua funciona con fuentes de energía limpias como la aerotermia o la geotermia, pero también con el gas natural.

Por su parte, el eléctrico funciona mediante resistencias eléctricas que generan calor y no es posible tener frío también.

El precio es más reducido pero no es tan eficiente como el de agua. Y solo se recomienda en zonas de clima cálido por ser su instalación más económica que un sistema de tuberías.

Donde se coloca: suelo, zócalo, pared o techo

Aquí me he centrado sobre todo en el tipo que se coloca en el suelo.

Pero hay más.

Porque puedes instalarlo también en:

• Zócalo radiante: instalación sencilla que puede llegar a sustituir el zócalo que ya tenga la vivienda.
• Pared radiante: al instalarse en las paredes la estancia se reduce, pero también es más sencillo de instalar que en el suelo.
• Techo radiante: este sistema es igualmente fácil de instalar pero no es tan eficiente como el suelo porque se calienta la zona superior de las habitaciones.

Instalación del suelo radiante: ¿Qué componentes incluye?

La instalación de un sistema de climatización por suelo radiante resulta muy fiable.

Porque cuenta con elementos prefabricados que han sido debidamente testados para garantizar su calidad y durabilidad.

Los sistemas de suelo radiante tradicional, por otra parte, cuentan con una serie de componentes comunes en cualquier instalación.

Por tanto, son los componentes que debemos tener en cuenta al calcular un presupuesto de suelo radiante para nuestra vivienda.

Componentes de un presupuesto suelo radiante

Panel aislante

En cualquier instalación de suelo radiante es imprescindible contar con un aislamiento térmico adecuado.

El panel aislante es el encargado de que el calor o el frío fluya hacia la superficie a climatizar y no hacia abajo evitando pérdidas de energía. Por tanto es una capa aislante.

En función del tipo de estancia a climatizar, uso, ubicación y zona climática elegiremos el panel adecuado.

Existen distintos tipos y modelos de panel aislante para adaptarse a las necesidades de cada instalación.

Pero como norma general se puede decir que, cuanto mayor sea la resistencia térmica del aislamiento utilizado, mayor será la eficiencia energética del sistema y también su coste.

Tuberías de suelo radiante

Son las tuberías por las cuales distribuimos el agua fría o agua caliente por las diferentes estancias de la vivienda.

Fabricadas en polietileno con barrera anti-oxígeno o en multicapa son tuberías flexibles para adaptarse al diseño de las instalaciones y resistentes a los aditivos del hormigón, así como a la erosión y corrosión que se produce con el paso del tiempo.

Los diámetros de tubería más utilizados son los que van desde los 16 mm a los 20mm.

Cuanto mayor es el diámetro de tubería mayor longitud podrán tener los circuitos.

Grupo colector

Formado por 2 colectores: ida y retorno, desde donde salen y retornan los diferentes circuitos de suelo radiante hacia las estancias que se van a climatizar.

Los colectores pueden tener desde un mínimo de 2 hasta un máximo de 12-15 vías en función del fabricante.

Se debe seleccionar un colector con un número de vías igual al número de circuitos de tubería.

Los grupos de colector deben incluir caudalímetros que permitan regular individualmente el caudal de paso por cada uno de los circuitos.

Además, otros accesorios también necesarios son los purgadores para eliminar el aire, las llaves de corte y los termómetros para comprobar el correcto funcionamiento.

Si se deseas tener un control de temperatura individual por estancia es necesario colocar en el colector cabezales para abrir y cerrar los circuitos en base a que se haya conseguido o no la temperatura deseada en la estancia asociada.

Banda perimetral

Fabricada en espuma de polietileno extruido, se coloca en el perímetro de cada una de las estancias para evitar la transmisión de calor desde el mortero del suelo a los tabiques que delimitan las estancias.

Suelen tener una cara adhesiva que facilita la fijación a la pared y un faldón plástico para evitar que el mortero se cuele por debajo de la banda perimetral y entre en contacto con los tabiques.

Placa de mortero

Una vez instalados los circuitos, se realiza una prueba de presión durante al menos 24 horas para comprobar que no hay ninguna fuga.

Y a continuación se vierte una un mortero de unos 5 cm de espesor sobre el que se colocará el pavimento final del suelo.

En algunos casos, en función del tipo de mortero utilizado, podría ser necesario aditivar dicho mortero con un líquido fluidificante, con el fin de obtener consistencias fluidas, mayores resistencias mecánicas y mejorar la durabilidad e impermeabilidad.

Por lo general, la aplicación del mortero es responsabilidad de la empresa constructora.

Y la empresa instaladora del suelo radiante proporciona el fluidificante.

Elementos de dilatación

Fabricados habitualmente en espuma de polietileno extruido actúan como protección de la instalación ante las dilataciones que se produzcan.

Tanto en la red de tuberías del sistema, como en el propio mortero debido a las diferencias de temperatura.

Es imprescindible su colocación en los pasos por puerta y en todos los locales con superficie mayor de 40 m2 o con un lado mayor de 8 metros.

Así como en los locales donde la relación largo/ancho sea mayor que dos.

Ventajas y desventajas del suelo radiante

El suelo radiante tiene muchas ventajas.

Pero también algunas desventajas que te voy a desvelar a continuación.

Ventajas del suelo radiante

Sobre las ventajas, ya te las he comentado más arriba, pero aquí te las resumo mejor:

Sistema de climatización eficiente

Al trabajar a temperaturas más bajas que los radiadores convencionales el ahorro de energía es mucho mayor: al menos un -20%.

Aún más eficiente con una bomba de calor de aerotermia y geotermia

Con una bomba de calor aerotérmica o geotérmica podrás ahorrar aún más: hasta un 80% de energía.

No existe a día de hoy un sistema más eficaz.

Además, la vida útil de los equipos con bomba de calor cuentan con una vida útil que puede llegar a los 25 años.

De modo que tendrás garantizado un sistema de climatización rentable -con un gasto mínimo- durante todo ese tiempo.

Y sin apenas mantenimiento.

Mantendrás tu nivel de confort todo el año

A diferencia de los radiadores convencionales, el suelo radiante reparte el calor o el frío por toda la estancia y de manera uniforme.

Concentra el calor a baja y media altura, de modo que la sensación de confort es superior a cualquier otro sistema.

Calefacción y refrigeración en verano

Además de calor en invierno, el suelo radiante puede emitir también frío en verano si trabaja con una bomba de calor de geotermia o aerotermia.

Liberarás espacio y mejorarás la estética de tu vivienda

Tendrás espacios libres en tu hogar que antes no tenías.

Sentirás el calor o el frío pero sin elementos visuales que rompan la estética de las estancias.

Desventajas del suelo radiante

Tendrás que hacer una inversión inicial más elevada que con otros sistemas

Esto es así.

Es uno de los puntos negativos de este sistema.

Y es la razón por la que muchas personas se lo piensan dos veces antes de instalarlo.

Pero si te paras a pensarlo bien, en poco tiempo habrás amortizado esa inversión y, al final, tendrás más ganancias que pérdidas.

El tiempo que tarda en transmitir el calor a través del suelo

Desde que enciendes la calefacción hasta que alcanzas la temperatura óptima tendrás que esperar varias horas.

De este modo, tendrás que conectarla con una antelación suficiente para tener la temperatura que deseas en el momento que la necesites.

Si la vivienda está ya construida la instalación puede ser compleja

En edificios de nueva construcción es sencillo hacer una instalación de suelo radiante.

Porque el forjado del pavimento está al descubierto y no es necesario levantar el suelo.

Pero en edificios construidos, se puede complicar al tener que levantarse todo el suelo.

Y esto aumentará con toda probabilidad el precio de la instalación.

El suelo radiante eléctrico puede provocar problemas de salud

El suelo radiante eléctrico puede llegar a producir un campo electromagnético nocivo para la salud.

El suelo radiante frío puede producir condensación

El frío a través del suelo radiante en zonas con un alto porcentaje de humedad puede llegar a producir condensación.

No obstante, esto puede solucionarse instalando controladores de punto de rocío que se activarán cuando se detecte la condensación.

Opiniones sobre el suelo radiante

Aquí te enseño unas pocas opiniones sobre el suelo radiante, de personas que lo tienen instalado en sus viviendas y ya lo están disfrutando

Conclusión

El suelo radiante es el mejor sistema de emisión que existe hoy día.

Si además lo combinas con una bomba de calor de aerotermia o geotermia, reducirás a mínimos el gasto energético de tu vivienda, tanto en invierno como en verano.

No obstante, debes valorar si es adecuado para tu caso concreto.

Para ello, lo mejor es que solicites un estudio gratuito a una empresa instaladora con experiencia, que valorará la situación de tu vivienda y te dará la mejor solución posible.